Entre el sábado y el domingo todo el grupo, a excepción de Toni, pudo competir. Los primeros en hacerlo fueron Joano y Sergio. El primero llegaba a Zaragoza para disputar el Campeonato de España de veteranos con ciertas dudas sobre las molestias que arrastraba. Una vez en el círculo, éstas no aparecieron pero le faltó algo de chispa para mover la bola. Esta vez no pudo ser y acabó en cuarto lugar en la categoría M-40 con un mejor lanzamiento de 12,75 m., algo lejos de las medallas que estuvieron todas por encima de los 14 metros (14,95 m. para Vicent Navarro, 14,55 m. para José Pérez y 14,15 m. para Guzmán Expresati). Mientras que en el Luis Puig se celebró el Campeonato Autonómico en el que participó Sergio. Su calentamiento fue muy malo lo que se tradujo en los siguientes cuatro intentos del concurso en los que hizo nulo en todos ellos. Sabedor de su fallo, Sergio supo corregirlo y en el quinto lanzamiento se iba a los 13,14 m. que le colocaban tercero y dejaba atrás los 12,63 m. que tenía con el giratorio y los 13,07 m. que poseía con la técnica lineal. En el sexto aún pudo mejorar e hizo mejor marca personal con 13,38 m. y colgándose la medalla de bronce, su primer metal en categoría absoluta.
Al día siguiente le tocó el turno a los discóbolos que se desplazaron hasta Elche para participar en el Criterium Autonómico de lanzamientos de invierno. Con un círculo mojado Arroyo y Manolo Fernández acabaron con 51,80 m. y 35,10 m. metros respectivamente. El de Mislata se quedó cerca de su marca de la temporada mientras que Manolo arrancaba la temporada con esta marca.